¿QUÉ ES LA VIDA? 

Comenzar un relato hablando de uno mismo no es de recibo pero una de los temas que más he valorado y que más me ha dado que pensar en este año es precisamente la VIDA. Este no es un relato al uso. El próximo día 23 de Junio volví a ella tras la operación del cáncer que se alojaba en mi mama. Los meses previos piensas en la muerte, ese miedo que te entra por si te quedas en el quirófano por la anestesia o por vete tú a saber. Miedos, incertidumbres.

Tras la operación y escuchar que ha ido bien, la alegría te invade el cuerpo y aunque no puedes planear nada a largo plazo solo quieres vivir de otra forma distinta a la que vivías. Más pausada, más tranquila, más amorosa, más cercana a los tuyos. Vivir, agarrarte a la vida. Tienes otra vida como un cuaderno de hojas nuevas donde escribir nuevas historias pero no sabemos cómo empezar a hacerlo.

Vivir en medio de la pandemia con un tratamiento de cáncer es vivir a medio gas. Una de las cosas que tiene el ser humano es la capacidad de reinventarse. He de decir que decepciones con amistades me he llevado muchas que me han dejado en soledad pero si no llega a ser por mis clases de fotografía o de pintura que me han dado la vida no sé qué hubiese sido de mí en este año. Y es que creo que la expresión que más he utilizado en este tiempo ha sido “me ha dado la vida” porque aquello que me lo daba me transmitía una paz interior, una satisfacción, una alegría o un bienestar que ahora saboreo más que antes. Eso es vida.

Salgo a pasear mucho para tener la rutina del ejercicio. A falta de césped de piscina, me tumbo en el césped del parque y miró al cielo como relajación. Disfruto viendo las nubes en el cielo o pasear a la gente y yo como observadora, eso es vida, eso es sanador. Eso es paz.

Cuando he tenido alguna salida con algunos amigos por Madrid veo mi ciudad de otra manera. Observo los estragos de la pandemia, el nuevo cambio que ha sufrido pero veo que los monumentos siguen ahí para poderlos fotografiar, que alguna obra de teatro todavía puedo ir a tiempo de no perdérmela, exposiciones de arte, tener un tiempo que no tenía y que quiero en definitiva agarrarme a la VIDA.

No quiero entrar ni en un sola discusión y cuando alguien me increpa por pasar por un sitio en vez de por otro, les digo: “Sinceramente, en esto no consta la vida” frase que de alguna manera la tengo que reinvertar para tatuármela en alguna parte de mi cuerpo. Ahora huyo más de las relaciones tóxicas, de discusiones estúpidas, de personas absurdas porque de eso no consta la vida.

Hay un estudio de la Universidad de Harvard dónde habla que lo importante en la vida a pesar de lo que muchos creen no es en el dinero o en tener un buen puesto de trabajo sino en las relaciones sociales y la calidad que tengas con ellas porque a veces la sociedad mata. Cuanto más solo estemos más propenso estamos a contraer enfermedades. Tema que me ha dado que pensar en este año. A veces se puede estar solo en compañía o tener relaciones tóxicas que llevan a enfermarte. Cuánto más relaciones sanas tengamos más salud tenemos.

Me gustaría cerrar con una frase de Mark Twain: “No hay tiempo, muy breve es la vida para disputas, disculpas, animosidades, pedidos de cuenta. Solo hay tiempo para amar y solo un instante por así decirlo, para eso”




Con este relato participo como #Divulgador en el mes de Junio en #hypatiacafe con el tema #PVvida